lunes, 24 de octubre de 2011

Oír llover



Que no, como oír llover.

Con muy poca originalidad, hoy conmemoro la primera tormenta que cubre toda España a la vez este otoño. Y es que, a pesar de que yo me cansaría de la lluvia permanente del norte en 2 días, ¡los días de lluvia molan! Sobre todo si tienes que estudiar.

Te despiertas, casi temprano, y no sabes muy bien si no hay luz porque no hay sol o en realidad son las legañas. Dejas sonar el despertador diez minutos más, otros diez, diez más, "estos diez ya son los últimos", otros diez y por fin te levantas. Hace más frío que ayer, te acercas a la ventana y...¡llueve! "¿llueve? ¡mierda!". Ahora te vas desanimada pensando "¿qué me pongo yo hoy si llueve?" Pero de repente te das cuenta de que es otoño y tienes un buen montón de ropa calentita que aún no te has puesto, unas botas casi nuevas para mojar tranquilamente y un laaaargo día de estudio por delante. La parte del estudio es importante, si tienes el día libre...igual ya no es tan buena idea que llueva.
Te tomas tu té calentito, con leche por favor, como cada mañana. Un buen pegote de rimmel, esto también es importante, teniendo en cuenta que se te encrespará el pelo justo un segundo después de salir de casa, necesitas estar guapa todo el día. Y ya estas lista para salir, mochila con apuntes a cuestas, camino a la biblio para disfrutar de tu día lluvia.

La tormenta chapoteará todo el día sobre las ventanas de la biblioteca, que si tienes suerte tendrá unos ventanales tamaño XXL, los relámpagos de vez en cuando crearán comentarios de asombro entre los demás estudiantes mientras iluminan la sala. Mientras, tú, sonríes cuando los truenos hacen temblar el suelo y repiquetear los cristales. ¡No te estás mojando! Y tienes banda sonora original para todo el día.



                           

Hoy, con muchas sonrisas...¡que hubo muchos truenos!, zapatos mojados y feliz porque...¡me acordé de salir con paraguas! :)



PD.: los comentarios y seguidores siguen siendo bienvenidos y serán agradecidos desde ¡ya! y también en su debido momento. A los que seguís reticentes...¡¿a qué esperáis?! Próximamente habrá extorsión.

7 comentarios:

  1. Ohhh Patri que genial!!!!

    Me ha encantado la parte en la que mencionas el delicioso pastel con el que te obserquiaron tus fantásticos compañeros de piso tras una ardua jornada de estudio!!

    oh...wait!

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  2. Bueno, comento, antes de la extorsión, en mis últimos estertores de consciencia de hoy. Me gusta la naturalidad con que escribes, Patri!!!Me mola y me hace ponerme en tu lugar casi sin querer! El único pero, es que si puedes deberías cambiar la fuente de letra de los comentarios, que o estoy muy dormido o no se entiende un carajo..Ale, buenas noche! ;-)

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  3. Coincido al 100% contigo. No hay mejor manera de estudiar que en un día lluvioso. Y mientras más llueva mejor!!

    Muchísimas felicidades por el blog y aqui te dejo mi aportación, una historieta sobre la lluvia que me gusta mucho:


    Hasta hace unos años, los adultos uruguayos aplicaban una fórmula infalible para sacarse de encima a un niño insoportable:

    --Andá a mirar la lluvia --le decían--. Y fijate si llueve de arriba para abajo o de abajo para arriba.

    Horacio Cassinelli acabó con esta útil tradición nacional.

    Una tarde, sus padres, hartos de vivir condenados a pregunta perpetua, mandaron al niño a mirar la lluvia que caía en el patio. Inmóvil como un gato, Horacio contempló largamente el repiqueteo incesante de la lluvia. Y después, informó:

    --De arriba para abajo, llueve mucho. Y también llueve de abajo para arriba.

    Y con dos dedos, mostró:

    --Un poquito así.

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  4. ¡Yo también te sigo! ¡Y también me encanta la lluvia!

    Un besito

    http://bohemiayaparte.blogspot.com/

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  5. ¡Muchas gracias! Yo también me quedo por aquí! (:
    PD: Me encanta la lluvia.

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  6. Bueno, si lo pintas así....hummm, me lo pensaré! pero mientras me decido, sigo pensando que donde se ponga un día de sol, lleno de luz, como el de hoy, no hay tormenta que valga.:)

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  7. Siempre me han encantado los días de lluvia,me recuerdan a mi niñez,ese pisoteo en los charcos con las consiguientes regañinas de mamá; así que me ha encantado tu descripción. Cuando comienzo a leer tus escritos, se me hacen muy amenos; la lectura fluye sola, a la vez que te imagino en cada lugar,en cada una de las situaciones que vas describiendo. Sigue así, a mi al menos me entretienes y me gusta leerte. Se despide "tu humilde seguidora", el seudónimo no me gusta mucho pero hasta que piense otro más original, utilizaré este

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