sábado, 16 de junio de 2012

Licenciarme





Técnicamente, esto no debería pasar por el milimétrico filtro por el que pasan todas mis cosas pequeñas para llegar aquí.


Técnicamente, para ser "algo pequeño" su importancia debe ser mínima y aún así hacerme ilusión.


No, desde luego, no puedo considerar licenciarme como algo pequeño. He llegado al final de la copa.


Después de seis años, solo puedo decir que, si me diesen a escoger de nuevo, volvería a elegir medicina, sin duda alguna. ¿Que somos freaks? Un poco ¿Que somos secta? Bastante. ¿Qué cuando nos juntamos sólo podemos hablar de IAM, ADVP, AIT, MEG, TEP, ACxFA, TVP? Vale ¿Que tenemos un idioma propio? Hmmm... sí, totalmente de acuerdo. Peeeero... no me veo haciendo nada distinto. 












¿Qué no? ¡¡Mentira!! me veo mis próximos ocho días tomando el sol en Riviera Maya. ¿Sabéis quién está de vacaciones? Servidora :D




Y ahora ha llegado el momento de cambiar esas letritas pequeñitas de la derecha del blog que dicen "estudiante de medicina" por "licenciada en medicina" y, eso, si es una cosa pequeña :)

jueves, 7 de junio de 2012

Cortar el cordón





Sólo por unos meses.

Parece que era hora de poner punto y final definitivamente a esos largos meses en los que cada "Happy Wednesday" disfrutábamos de Hiroshima. "Cortar el cordón" decían algunos ayer.



Ahora que todos somos un poco más ÉL y un poco más ELLA, un poco más Hiroshima y un poco más Never, en Francia, parece que hay que dejarla ir. Yo casi empiezo ya a pensar en la próxima, aunque aún no tenga nombre.

Como despedida, "Hiroshima mon amour", la película. No la habíamos visto jamás, nos habíamos mantenido vírgenes hasta ayer, para no ensuciarnos, para mantener inocente nuestro personaje; pero sabíamos lo que iba a pasar en cada momento, podíamos repetir el texto, de principio a fin, cada palabra, cada frase, cada coma era idéntica a nuestro texto. ¿Era de esperar? Sí, pero a mí no dejó de sorprenderme ni un sólo segundo. 







Esas frases, eran mis frases. Esa, "ELLA", a la que rapaban el pelo era yo. Esa, la pequeña que corría por Never, "ELLA" era yo. Éramos cada uno de nosotros. Era nuestro sótano, nuestro amante, nuestro rodaje, nuestro alemán. Esa locura, era nuestra locura. La locura que nos ha mantenido unidos miércoles tras miércoles y que ahora dejamos escapar. Y tras las lágrimas, él nos abofetea y, repentinamente, nos devuelve al mundo. Ahora, aquí estamos, somos y seremos Hiroshima y debemos dejarla ir. Ya sólo nos queda luchar contra el olvido.







Quién sabe para esperar qué. Pero, mientras, el pelo...me está volviendo a crecer. Me da igual. Pero me está volviendo a crecer.



"La Piscifatoria", estic boja d'amor per tu :)


Eso sí, por suerte, cerramos sólo por vacaciones.