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martes, 16 de octubre de 2012

Danzar




- Danzar, dice- me contesta mi yo más realista.

E igual tiene un poco de razón. A cualquier cosa le llaman danzar, le llamo, quiero decir. 

Y es que me lían. Yo soy de liarme fácil. ¿Qué te parece si en vez de ir los Nasty Mondays a trapecio probamos este curso nuevo gratis de danza contact acrobática? Y yo, que soy de fácil impresionar, en seguida me imagino dando saltos improvisados mientras una mano me toca la espalda, con alguna música jazz de película. Sí, yo soy muy peliculera.

Pero claro, en la imaginación -en la vuestra también- todo queda genial. Imaginadme. 



¿Ya? Pues no. Han sido dos horas de hacer la patata, la patata rígida. ¿Habéis probado a hacer una voltereta después de 15 años sin hacerla? Probadlo. Es la voltereta patata. No se necesita experiencia. Pero tampoco vergüenza. Tu compañero improvisado te pone los pies en el culo y te levanta por los aires (eso sí, cuando te sale, te sientes Dios). Te restriegas por el sobaco de un desconocido mientras sientes la música. Te caes de morros contra tus propios brazos, que creías bien apoyados en el suelo, ante la semiatenta mirada de 15 ingenuos más, que creían que parecerían plumas durante dos horas. Y acabas con una jam session de patatismo ilustrado.

¿Para qué? Para sentir como te deshaces de las raíces que echas durante 7 horas de biblioteca. Para asegurarte que tienes un cuerpo, aunque un tanto inmóvil. Para comprobar que aún te queda algo del sentido de la improvisación. Para asegurarte de que estás aprovechando todo lo que te ofrece tu ciudad. Y oye, porque sí, que la vida son dos días ;)

martes, 20 de marzo de 2012

Payasear





Oficialmente.


Cuando decidí apuntarme al taller de clown con "El laboratorio de tonterías" lo lunes, no sabía lo bien que me iba a venir. Mi vida era casi estable en aquellos momentos. Poder convertir cada "Nasty" en un "Funny Monday" (para mí es que aún es Monday, tendré que empezar a luchar contra mi yo más trasnochadora...), sin excepción, es todo un regalazo.


"El colmado", que se define a sí mismo como algo así como "el distribuidor de cultura", nos acoge un ratito a la semana para que los "culturales" seamos nosotros (cuantas comillas me gasto ¿no?, que poco concreta soy al hablar...serán las horas).


Dos horas ininterrumpidas de saltos, risas, convertirte en pelota, cuentacuentos, ciego o lázaro, un cuadro viviente, el nuevo jefe, samurai, una ducha hecha de dedos, tullido... te libera de toda la tensión que hayas podido acumular la semana anterior o -aún mucho mejor- de toda la que está por venir.


No podría haber mejor manera de empezar una semana :D

martes, 6 de marzo de 2012

Dibujar





De nuevo.

Siempre he dibujado y, a la vez, no lo he hecho nunca. No he tenido, como alguna gente, una constancia que hiciera que pudiese decir "yo dibujo" pero si podía decir "me gusta dibujar" o, en todo caso, "yo dibujaba". 

Y cuando tienes un hobby abandonadillo, momentos como éstos son los que te hacen retomarlo. Siempre he dicho que lo que a mí me falta, sobre todo, es inspiración. Así que en días así con millones de cosas en la cabeza, coges una cualquiera, la imprimes, y de paso tu "rum-rum" mental se para, desaparece por completo. 



El sábado fui con una amiga a una cafetería que hacia tiempo que le tenía ganas, es la Galería Cosmo, y a parte de un ChaiLatte buenísimo, tienen unas cartas preciosas forradas con telas floreadas de colores -muy yo y muy mi carpeta nueva- y cada silla y sus mesas son diferentes a las demás. Es de esas cafeterías con encanto a las que una vez entras ya no puedes dejar de ir. Y allí tuve, entre muchas otras, a cada cual más extraña, esta misma conversación -sobre mi no-inspiración- con mi amiga. Cuando salimos me dijo, el lunes vuelve y dibuja al hombre de calcetín, por ejemplo. El hombre del calcetín es una de esas conversaciones/historias que no viene a cuento y no tiene nada que ver con esto, pero, que sirve, como cualquier otra cosa, para tener algo que dibujar. Y ahí he estado yo esta tarde. Con mi ChaiLatte, mi carpeta nueva para guardar dibujos con un estampado en relieve de florecillas de lo más retro y mi hombre virtual, dentro de un calcetín.

Olvidándome de todo lo demás.



Y cuando me he dado cuenta, llevaba más de una hora dibujando, inmersa en mis no-pensamientos, siguiendo la punta de un lápiz. 


Eran las siete y media, hora perfecta para llegar con tiempo a mi primera clase del taller de clown. Sí, esa que va a convertir, sistemáticamente, a partir de hoy todos los lunes en un NO"NastyMonday" :)

lunes, 20 de febrero de 2012

Cinefilear


Nuevo verbo para las tardes de lunes.


Después de un fin de semana (largo) de carnaval a ritmo frenético, la vuelta a la vida "no-vampiresca" -ésa en la que se vive de día y se duerme de noche- se plantea casi imposible. No sólo porque sabes que el lunes es el día en el que tu tiempo de ocio queda más lejos, sino por la sensación de superglue en los párpados, el intento de no convulsionar ante la luz de sol y por la resaca mental que te impide ir a una velocidad mayor a 1 pensamiento/h


Así que para reactivar nuestras mentes, podríamos habernos bebido un Redbull, pero hemos decidido hacer sesión de cine casero de lunes tarde. Kilos de palomitas, litros de Coca Cola y "Deseando amar" ("In the mood for love" para los amantes de las V.O.) Una de esas películas que nos habían recomendado por activa y por pasiva. La historia de amor más triste del mundo, según he leído en alguna crítica. Una de esas películas que requieren tus 5 sentidos. Cada sonrisa, cada mirada, cada zapatilla movida de sitio, un comentario hecho a destiempo, una corbata, un cigarro mal colocado, todo cuenta. Nada es casualidad, todo está en su sitio, porque es ahí donde debe estar. Y, a partir de ahí, una historia de amor, triste, con un final para reflexionar.


Para recordarnos que era "Nasty Monday", la película no se ha dejado ver con facilidad, pero nosotras somos más fuertes que unas cuantas dificultades técnicas, seguidas.

Dado que hoy todo el mundo habla de los Goya -yo creo que paso- propongo convertir los lunes en el nuevo día del espectador casero y seguir con alguna de las premiadas. ¿Quién se apunta?





Con la cabeza llena de pájaros (las palomitas son pájaros, ¿no?) amorosos e ideas sobre las que pensar, ¡¡feliz lunes de resaca!! :)

lunes, 13 de febrero de 2012

Ponzoñear





Poderosamente.


Bienvenida nueva semana. Bienvenido "Nasty Monday". Es matemático, que mal sientan los lunes. Pero Patri... ¡¡si estás de vacaciones!! Lo sé. Y me aburro. ¿Qué hacía yo antes de tener que estudiar? 


Y cuando estaba a punto de plantearme empezar a ir a clase -algo que no hago desde hace mucho tiempo, a mí me va bien así, cada uno tiene su método- en medio del más desesperado aburrimiento, una amiga me ha recordado la solución a esas tardes de domingo parmesano de "nadie sale hoy después de cinco días seguidos de fiesta y acabo de recordar que había algo que me preocupaba escondido debajo de la resaca/borrachera". La "Poderosa Ponzoña"

Creo recordar, si me equivoco es libre de venir y corregirme, que es una receta familiar en contra de los malos momentos y que resucita a un muerto (un muerto de pena, creo). Los ingredientes base son helado,  Baileys y crema de leche y después ¡se vale jugar con todo! Caramelo líquido, topping de chocolate, canela, virutillas (¡¡hubiese sido genial encontrar virutillas!!) o cualquier otra cosa dulce/pastelera que te apetezca encontrar debajo de la crema de leche. Nos hemos planteado que el topping fuese de chorizo, pero lo hemos descartado al final.

Así que me he ido rápidamente al súper y, además de comprarme todo lo que me ha apetecido, sin miramientos (del precio ya me preocuparía en caja), juntando en mi carro entrecot y Kinder chocolate -sí, estoy en transición de edades-, me he hecho con todas las guarradas todos los ingredientes juntables en un bol de postre, ¡¡de los de vitrina eh!! nada del bol de desayuno.

Y ¡ala! a ponzoñear este "Nasty Monday"

Feliz lunes dulce :)


lunes, 16 de enero de 2012

Golosear





Como medida anti "Nasty Monday". Científicamente testado.


Los lunes apestan. Huelen mal, saben mal y por lo general, van mal. Ésto es así. Y punto.


En esos días en los que recortarías una sonrisa de la portada de algún dominical para pegártela en la cara... a veces el primer cambio empieza después de la ducha, es el pistoletazo de salida. Cuando te obligas a moverte sí o sí. Con ganas o sin, pero en movimiento, para que se vayan recargando los ánimos. Yo es que tengo una dinamo orgánica. 


Cumplir con tu deber ya sube un poco los ánimos, pero no siempre es suficiente. No, los "Nasty Mondays" no lo es, definitivamente. 


Contra el asqueroso lunes solo funcionan, olvidarte del tamaño de tu culo y 1g/día de Irse de cañas con amigas, por vía oral; Queso Gruyere y chocolate recién llegados de Suiza, al llegar a casa, 60mg de preparado granulado para vía oral y Bolsa gigantesca de chucherías vía sublingual combinada con Película "El árbol de la vida" en gotas para vía oftálmica. 


El árbol de la vida DVD. rar, descarga completa :)








PD.: Para los que se hayan quedado pensando en el "Científicamente testado", tenéis una oportunidad de change un poco el world firmando por "La casilla de apoyo a la ciencia en la declaración de la renta 0'7%" en Actuable. Os quedan 15 días :)

sábado, 7 de enero de 2012

Avituallarme





Para un mes de reclusión y/o reclutamiento.


Con un mes de estudio por delante y dos exámenes como objetivo, a partir del "Nasty monday" me esperan cuatro semanas de estudio a discreción y reclusión bibliotequil de la que ya no me puedo zafar. 


Primera campaña, destino rebajas. Jerseis lanudos y gordotes nuevos para estar bien cómoda (y guapa, que hay que seguir pareciendo persona) y unas buenas botas de piel estilo militar "made in Vietnam" (cruel, lo sé, pero me viene al huevo para mi comparación con el ejército...) que aguanten vientos y tempestades.


Segunda misión, un buen corte de pelo, cómodo y útil. Es decir, rapada al #13, de nuevo. Esta vez yo sola, máquina en mano y yo, en una lucha cuerpo a cuerpo. ¡Y mis buenos 2 cm me han salido después de tan sólo mes y medio!


Y preparada... lista... ¡ya! Mañana, vuelta a Barcelona. Si hasta ahora no sabía en que día vivo, por culpa de las fiestas, dentro de día y medio... desorientación temporoespacial total y absoluta. Única regla VIP, saber cuándo es domingo, porque hay que cambiar de biblio, que la mayoría cierran.


Desayunaré subrayadores, una buena ducha de té, para comer 8h de apuntes, un termo de minisiesta después de comer, horas y horas de culo pegado a un libro, un descansito de 15 minutos de post-its, cenar fotocopias y dormir guaraná. ¿Era así, no? Bueno... ¡Qué más da!


Dentro de unos días me arrepentiré de lo que voy a decir ahora mismo, pero... ¡hasta tengo ganas! De nuevo me hace falta un poquito de rutina. Ropa nueva, cabeza nueva, apuntes limpios esperando a ser subrayados y tour bibliotequil a la vista. ¡Yuhu! :)

lunes, 14 de noviembre de 2011

Hacer propósito de enmienda





Aún sabiendo que volveré a caer. No volveré a dejar 
trabajo atrasado.

 


Hoy vuelve a ser lunes. Sí, mido la intensidad, felicidad y las expectativas puestas según el día de la semana que sea. Y si me decís que vosotros no, no me lo creo. Pero últimamente los lunes, que hasta ahora eran un día sin más, deprimentes a veces, sí, pero insulsos, sin emoción, ¡se me están volviendo rebeldes! Según la revista "Muy interesante" el peor día de la semana es el martes, pero yo discrepo. 
Sobre todo cuando vienes de pasar cinco intensos días de "kit-kat" absoluto de la vida real con tu pareja.
A parte de mi nuevo apartado de los miércoles, voy a tener que coger la iniciativa de la Sala Apolo y crear un "Nasty Mondays para arreglar".




Como se va intuyendo, el día no empezó nada bien. Tenía que ir al banco a hacer un ingreso del viaje de final de carrera (inciso, a ver si va a ser el viaje lo que le da vidilla a mis lunes..., sigo) pero al llegar, mi número de cuenta tenía 21 números. Podría haber optado por quitarle un número al azar y probar suerte...pero seguro que las posibilidades de pérdida eran bastante mayores, así que no lo hice. Escogí la opción correcta, que suele ser la que más pereza da y más de mal humor te pone, y volví a casa a comprobarlo. El problema era fácilmente solucionable, sí, pero llegué tarde a prácticas. Justo el lunes, el día que el médico piensa que llegas tarde porque aún te dura la resaca...
¡Bah! Al final la mañana fue bastante bien, si eludimos la parte en la que mis pacientes, que tienen depresión, se pasan la mañana llorando y yo tengo que forzar mi mejor sonrisita de "venga mujer, arriba! arriba!"
No estaba yo para tirar cohetes, pero salí de allí soñando con la siesta que me iba a echar después de comer, hasta que me despertó de sopetón la lluvia...y esta vez no llevaba paraguas. Así que agaché la cabeza y caminé lo más rápido que pude, sin correr, hasta casa y al llegar...¡los ascensores no van! ¡Y vivo en un séptimo! En serio, ¿pero qué le pasa a este maldito lunes? Y entonces fue cuando vi, que era el momento de aplicar el "siempre hay una parte positiva" y el "tú arreglas este día como que te llamas Patri"

Así que después de decirme que mañana tendré el culo más duro que ayer, gracias a esos maravillosos siete pisos de escaleras, me decidí a solucionar este oscuro lunes y me apliqué un "no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy". Que cuando lo acabas da una sensación de autosatisfacción que no puedes con ella :)

Pues eso, que cogí un trabajo de Gestión hospitalaria que tenía pendiente sobre "los recortes de sanidad" y me puse a escribir sobre economía como si supiera. Eso también es divertido, probadlo. Sin levantarme hasta acabar.

En algún momento, como estaba parca en palabras y me hacía falta imaginación, recurrí al proyecto de una amiga. Es una Escuela de Competencias (que os invito a visitar, pinchando el enlace), entre ellas la creatividad e innovación, así que pensé que me podría ayudar. Después de echarle un vistazo, vi que no podría ayudarme con mi trabajo de gestión, a eso tendría que enfrentarme yo solita, pero  sí que es un proyecto muy pero que muy interesante, basado en el desarrollo de competencias útiles. Sobre todo ahora que el mundo laboral está como está.

En fin, que ahora estoy por las nubes, que ese trabajo me estaba ya pesando mucho a las espaldas, cada vez más, y encima se me acababa el tiempo. Y además, le he dado una nueva utilidad a mi escritorio, para pasar a ser lugar de estudio en vez de trastero :)

Y con esto y un bizcocho... ¡Feliz Nasty Monday! (otro día, ya si eso, que rime...) :D

lunes, 7 de noviembre de 2011

In crescendo




El ritmo. Del día.

Y es que después del día "pian piano" de ayer, el de hoy no pintaba mucho mejor.

Debo darle las gracias y otorgarle el premio al "mejor aguafiestas del fin de semana" a mi gran resfriado otoñal. A él debo agradecerle también mi cara de lerda (boca semiabierta y mirada de perro pachón), mi nariz de pimiento morrón y mi voz gangosa. Así que esta mañana, ésta era mi situación. Se me planteaba por delante un día poco interesante, cuya mayor emoción iba a ser la caja de antihistamínicos que iba a estrenar.
Me propuse intentar mejorar el día y decidí estrenar ropa (creo que fue ahí cuando pulsé, sin querer, el botón grande y rojo de "¡warning! día emocionante a la vista"), camisa vaquera nueva y cinturón nuevo "estilo western", fruto del fin de semana de compras con mamá.
Todo empezó a animarse justo después de vestirme, me avisaron de que ya estaban las notas del examen que hice hace dos semanas. ¡Crisis! Después de un año de Erasmus en Italia donde te decían las notas al momento, ya no me acordaba de los nervios, el mal cuerpo y el temblor de manos que me entra cada vez que tengo que mirar una nota por internet. Busca la página, pon la contraseña, espera (mis ordenadores nunca han sido muy rápidos...), busca el archivo, búscate a ti y...¡sorpresa! Aprobado. ¡uf! ¡gracias! Primera emoción del día. Con sonrisa y todo. Y eso que es difícil reír y sorber mocos a la vez...
Al menos salí de casa más animada, dirección a la biblioteca (destino al que no llegué), con la intención de adelantar algo de trabajo que tenía (y sigo teniendo...)  pendiente. Mientras intentaba solventar unos problemillas de unos asuntos del viaje de fin de carrera (sí, otro amasijo de preocupaciones más) pasó un amigo corriendo, con la mano en la cabeza y la cara ensangrentada. ¡¿Eh?!
Sí. Y a partir de aquí es cuando el título del post de hoy cambia a: Crónicas de urgencias.
Se había dado un buen golpe en la cabeza  y todos sabemos que la sangre es muy escandalosa y que tras limpiarla todo parecía menos impresionante, pero era posible que necesitase puntos. Así que, los dos a urgencias, con la bata blanca puesta para que nos atendiesen antes. Parecía que funcionaba. En todos los papeles ponía: paciente "de la casa", incluso remarcado con fluorescente amarillo. "De la casa". ¡¡¿¿De la casa??!! Ala. Pues ya podemos aplicar el refranero español. "En casa del herrero..." o "Donde hay confianza..." ¡Casi cuatro horas para 2 miseras grapas! Eso sí, las horas en urgencias, si tienes paciencia (he aquí el significado de "paciente") pueden ser muy divertidas. A las viejas les encanta quejarse y gritar "enfermeraaaaa, me hago pipí", "enfermeraaaa llevo aquí ya dos horas y estoy operada tres veces de corazón", pero la palma se la llevan si el del box de tu lado grita: "enfermeraaaaa, es pescado! pescado!" Y ante esto, saquen sus propias conclusiones.

                         
Foto gore no apta para aprehensivos.
  

Pues sí, al final, día completito donde los haya. Las apariencias engañan, así que coged con ganas cualquier día, por malo que parezca al principio, porque siempre está a tiempo de dar un giro de 180º. 

Eso sí, mi cara de peggy sigue aquí y mis pañuelos parecen de alambre de espino, pero si tengo suerte, aún puedo dar pena y que alguno de mis compañeros me haga la cena :P